A los de nuestra generación, la trilogía Regreso al Futuro nos deparó algunas de las más gratas satisfacciones que una peli de teens puede dar. Ciencia ficción, american way of live, buena música -Huey Lewis and the News-, coche molón y historias con tres happy ends, entre 1985 y 1990. Aún recuerdo cantar a capella (pido perdón a los que realmente canten)con los colegas la canción "Naturally" entre los vapores etílicos del cierre de las discos y/o bares (la última vez este verano). Fue un éxito universal (lo suficiente para que sigan parodiándose sus escenas: en Family Dad recientemente ví la escena de la fiesta de graduación en la que Brian, el perro, hace de Marty McFly, tocando en vez de a Chuck Berry a Rick Asley. Incluso la expresión heavy, muy de la época. Total, que en la propuesta sobre quién compraría el modelo de Nike que McFly llevaba en la segunda parte, ubicando el modelo en 2015, probablemente ya tendrían un cliente.
La leyenda puede hacerse real... o no.
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